"nos enteramos de que la liga española, por tanto, al menos, también las competiciones internacionales de clubes están adulteradas."
2023-02-26
Después de comprobar que finalmente se aprueban en España leyes que no solo van contra el sentido común, lo que es peor, contra las leyes de la naturaleza. Ya que, por ejemplo, van contra la biología, al fundamentarse en la conocida “Queer Theory”. La misma que hace años, cuando escuché por primera vez, me hizo pensar que afortunadamente aquí su implantación sería residual, puesto que supuestamente somos un país serio.
Cuando nuestras leyes, aprobadas por los mismos que dicen representarnos en el Parlamento y, luego comprobamos que hacen lo que quieren sus partidos, a sueldo de intereses que no consigo comprender. O sea, quienes les dan ese empleo tan bien pagado, tanto a nivel formal a través de la nómina. Como a nivel informal, casi siempre ilegal, a través de dietas y gastos de representación por cuestiones ficticias que no deberían cobrar. O lo que es todavía peor, dádivas y “convolutos”, como decía el inefable exembajador alemán Guido Brunner, siempre ilícitas. Y otras que, no siendo ilegales, son profundamente inmorales, como las de convertir a personas que no cumplen los requisitos que, si deben cumplir los verdaderos trabajadores de las grandes empresas, en consejeros cuyos sueldos suelen tener muchos ceros. Es un hecho comprobable que casi la mitad de las empresas del Ibex 35 cuentan con consejeros que previamente fueron ministros, consejeros autonómicos o presidentes de algún Gobierno.
Que los políticos no conocen la más mínima decencia, es casi requisito sine qua non para serlo de renombre. Y aquellos que verdaderamente se acercan a la política con verdadera vocación de servicio público, es el mismo sistema de partidos quien terminará con ellos. Así podemos ver en todos los partidos del arco parlamentario personas que lo único que aportan es la zafiedad, cuando no la desvergüenza y la inepcia más absoluta. Y lo hacen siempre justificando sus actos en base a que representan la soberanía popular, lo cual viene a ser lo mismo que reconocer que la sociedad es tremendamente inmoral. Pero esto no es así, ya que los votantes, una vez ejercido el voto, no contamos para nada. O será que realmente somos así.
Recuerdo un chiste que decía algo así: hola vengo a hacerme árbitro. A lo que el administrativo de la federación decía: Pepe apunta al hijo puta este. Entonces el aspirante respondía: pero oiga. Y entonces el administrativo respondía: bórralo que no sirve.
Como decía Freud, el chiste no es más que un mecanismo que la sociedad utiliza para enfrentarse a la represión que ciertos hechos sufren o generan. Por lo que representa a la sociedad de donde emerge. Y es que según eso habría que estar un poco loco para querer serlo, ya que su familia nunca descansa, al serle recordada todos los domingos. Ahora nos enteramos de que la liga española, por tanto, al menos, también las competiciones internacionales de clubes están adulteradas. Puesto que funcionaba una “mafia” arbitral que cobraba al menos de un club que ha sido cazado, y curiosamente es catalán ¿Y por qué digo esto? Fundamentalmente porque el actual gobierno no ha dudado en legislar “ad hoc” a demanda de los golpistas catalanes. Pues no se han quedado ahí, también en diciembre pasado legislaron una ley del deporte que ahora beneficia a un equipo catalán, por no recordar que el ministro de deportes es también catalán.
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