"Así se construye la imagen intachable de quien no hace nada por Andalucía; al menos nada bueno, porque la destrucción de la sanidad pública y de otros servicios públicos básicos en nuestra tierra tiene dos claros nombres: Moreno Bonilla y Junta de Andalucía."
2023-03-12
Debe ser el efecto del trabajo “callado”, al que de forma inaudita apunta la Consejera. La misma que señala que la orden de tarifas, -auténtica llave para privatizar nuestra Sanidad-, “es simplemente un marco normativo”. Pues sí; no se le puede echar más jeta. Y me duele llegar a esa conclusión. El único hito de la Junta en cuanto a la ciudad sanitaria de Jaén ha sido aceptar la cesión de los terrenos municipales. Eso sí, para que parezca que hace algo, monta un sarao cediéndole los mismos terrenos a la Consejería (Algo así como cambiarse de mano lo que le han regalado). Le da igual. No hay medio que le tosa; la mayoría absoluta y el pingüe presupuesto para propaganda acaban con cualquier tentación mediática de denuncia. Así se construye la imagen intachable de quien no hace nada por Andalucía; al menos nada bueno, porque la destrucción de la sanidad pública y de otros servicios públicos básicos en nuestra tierra tiene dos claros nombres: Moreno Bonilla y Junta de Andalucía.
Y después está lo del tranvía. Lo he denunciado desde que Moreno Bonilla preside la Junta y Julio Millán el ayuntamiento capitalino: La Junta y el PP no iban a dar ni un paso firme por el tranvía (de los de verdad), y mucho menos echarlo a andar, mientras Julio fuese alcalde; al menos antes de las elecciones municipales, porque temen que la gente vea nítidamente en ese tranvía por sus calles un triunfo de Julio. De su gestión, de su persistencia, de su prudencia, de su responsabilidad.
A la Junta le importa Jaén nada; y al PP menos. El único interés es echar como pueda de la Plaza de Santa María a un gran alcalde, y cambiarlo por uno suyo, el que sea, que traiga otra vez a la capital esas políticas que tan bien conocemos en la capital, y en las que no gana Jaén; solo lo hacen algunos del PP.
Hoy día lo único que interesa a la Junta en Jaén es colocar a su Director General de Consumo en cuantos actos vengan a celebrarse. Dicho con ironía, no se extrañen si se lo llegan a encontrar en su propia boda o en algún bautizo de un familiar; es verdad que pintaría lo mismo que en buena parte de actos en los que participa, pero hay que estar en todas las fotos, sean de lo que sean. Con lo que ha criticado el PP el Ministerio de Consumo, y ahora ha descubierto una capacidad de cobertura a la que difícilmente llegaría un ciertamente más comedido ministro Alberto Garzón.
Yendo a lo serio, a lo muy serio, lo terrible es que el escenario que construye la Junta para la capital es dañino, y muy doloroso; y absolutamente injusto ver cómo un muy buen alcalde se deja la piel por su ciudad, mientras quien tenía que ayudarle no cesa de ponerle palos y piedras en las ruedas, y no para de tratar a puñaladas a una ciudad y a un alcalde que se ha ganado la confianza y el cariño de la gran mayoría de los jiennenses por lo único que se le pedía: trabajo, esfuerzo, y pelear con quien sea por el bien de la ciudad.
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