... La salud en nuestra Andalucía se ha convertido en una especie de suerte para unos pocos y una sueño para muchos,

2023-12-31

 

El sorteo de la salud

 

El pasado 22 de diciembre se celebró el sorteo extraordinario de Navidad, más conocido como el Gordo de Navidad, donde casi la totalidad de los españoles jugaba al menos un décimo de lotería.

Tras el sorteo, la grandísima mayoría de los españoles que no salieron premiados en el sorteo se transmitieron cordialmente unas palabras de consuelo: por lo menos que no nos falte salud.

Y aunque podamos pensar que es simplemente un acto reflejo que tenemos para compensar nuestra falta de suerte o acierto en la lotería de la probabilidad, ahora más que nunca se convierte en un deseo real para nosotros y para todos.

La salud en nuestra Andalucía se ha convertido en una especie de suerte para unos pocos y una sueño para muchos,

ya que las listas de espera interminables para poder acudir a un especialista o para ser intervenido están siendo terriblemente larguísimas. De hecho, se ha publicado hace unas semanas los datos y Andalucía posee los peores datos para enfermar de toda España.

Y si por casualidad hay algún lector de derechas que ame a Juanma por encima de todas las cosas, debe no solo saber, sino reconocer que las competencias en Sanidad le corresponden íntegramente a la Junta de Andalucía gobernada por la derecha desde hace más de 5 años. Por lo que ya no es culpa del anterior gobierno socialista, ni es culpa del actual gobierno socialcomunist-abolivariano-independista-bilduetarra-separatista, sino única y exclusivamente responsabilidad del PP.

Pero no solo demuestran una ineptitud, ineficacia e inutilidad en la gestión, demostrado con su intento fallido del convenio con la sanidad socavado y hundido en los juzgados por mala praxis, sino que llevan mintiendo sobre los datos sanitarios varios años no publicando los datos oficiales bajo excusas estadísticas.

No entiendo como una antigua profesional de la sanidad pública que ahora es la responsable de la Consejería de Salud en Andalucía, que alardeaba en su día de luchar contra el abandono de los gobiernos socialistas a la sanidad jiennense, ahora parece que cría excusas en las macetas de su balcón todos los días para ir soltándolas allá dónde haya un micrófono.

Catalina la conocí precisamente en las primeras reuniones que se hicieron en la recién nacida plataforma provincial en defensa de la sanidad pública como representante del PP. Sí, ¿a qué os hace la misma gracia que a mí me hacía? Su presencia se basaba en intentar dirigir los mensajes de la plataforma para que no se virasen contra el gobierno de Rajoy (en plena época de copagos sanitarios a través de la Seguridad Social, reformas sanitarias para acabar con la universalidad de la sanidad pública española, disminución de la financiación del Estado en Sanidad para las Comunidades Autónomas, …) y

para su partido ella era la mejor representante para esta recién nacida plataforma como trabajadora del sistema sanitario andaluz.

Claro está que su presencia no solo incomodaba, sino que representaría un lastre para cualquier plataforma ciudadana que se digne, ya que la presencia de representantes del PP y del PSOE en ellas era más absurdo que el Dioni en el Consejo de Administración de BBVA. Y se dieron cuenta pronto de que sobraban porque eran representantes de los culpables de la situación sanitaria cuando los miembros de la plataforma comenzamos a generar el decálogo de reivindicaciones para acabar con los recortes, externalizaciones, abandonos, … ¡Cómo olvidar la cara de Catalina cada vez que interveníamos alguno/a para proponer las reivindicaciones de la plataforma!

Y ahora es la jefa de la Sanidad andaluza. Una jefa de un servicio que tiene peor de lo que estaba y que demuestra con los ceses y dimisiones que su gestión es inequívocamente nefasta, por no utilizar otros adjetivos más duros.

Es una vergüenza esperar casi un año para que te den cita un especialista o para ser intervenido. Es una vergüenza que siendo encima ella una profesional de la sanidad pública, genere contratos y acuerdos para desmantelar la sanidad pública y venderla a la sanidad privada. Es una vergüenza que el simpático Juanma, de la mano de Catalina, no inviertan más en la salud de los andaluces y andaluzas para garantizar un derecho básico de la ciudadanía andaluza. Es una vergüenza que nos mientan tanto y que se inventen tantas excusas sobre su nefasta, ridícula, insultante y dañina gestión de la salud en nuestra tierra.

Por eso, hoy más que nunca, sin necesidad de sorteos de lotería, os deseo que no os falte salud. Feliz 2024.


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