DOMÈNEC MARTÍNEZ GARCÍA

 "se dolía la María.

2025-09-07

Fotos, geranios y olivos

Le robaron las fotos de su niñez. Aunque ella afirma que fue feliz en Cañete de las Torres. Lo escribió mucho más tarde en un cuaderno escolar, Mi infancia, mi juventud, mi vida.

Retrata su paisaje emocional. Allí vivió su particular retirada, y la de su familia. Habían llegado unos años antes, buscando algo más que la economía del esparto dominante en los pueblos de las Alpujarras almerienses. Mi abuelo Juan, era segador, de sol a sol. Aunque también regentaron una posada cuando llegó la República. Las arengas de Queipo de Llano en las ondas y las tropas nacionales a las puertas de Cañete, anunciaban lo que estaba por venir: “las mujeres de los rojos van a saber lo que es un hombre”. Este recuerdo marcaría para siempre a la María, una niña de once años.

María García Martos, nació un siete de mayo de 1925, en Fiñana. En su partida de nacimiento se añade una nota: casada el día 9 de febrero de 1947 con Manuel Martínez Plaza. En la primera mitad de los años 80, acude por decisión propia a la escuela de adultos Antoni Rovira de Terrassa. Allí irá componiendo a su aire, textos y poesías nutridas de sus vivencias e ilusiones. El tiempo casi todo lo cura.

Tuvimos que dejar la matanza de un cerdo que se quedó sobre la mesa. La huida fue dramática. El abuelo Juan y la abuela Carmen cargaron el equipaje que pudieron, y los niños: la Paca, el Juan, la Isabel, la María, la Josefa, el Alfonso y el José, en un par de mulas. La abuela embarazada. Dejamos la mesa puesta. También las fotos de su niñez, se dolía la María. Fueron andando hasta Andújar, allí estuvieron escondidos un tiempo. Después prosiguieron su viaje. Más de 200 kilómetros, sorteando las bombas y ocultándose bajo los olivos. Una de ellas cayó muy cerca y mató a una de las mulas. Cuando la comitiva llega a Almería, empieza una nueva etapa. María, recuerda con cariño sus estancias en Granada, no tanto su vida en el pueblo.

Pronto conocería su nuevo y definitivo destino. Era el año 1947, en tierras catalanas, un barrio periférico: campos, fábricas, y autoconstrucción. Tampoco eran tiempos felices. Largas jornadas fabriles, desgarros humanos y cartillas de racionamiento. Aunque supo cultivar geranios, componer ramilletes de flores silvestres y encalar cada primavera, añadiendo algo de color a las paredes frías de ladrillo.

Arraigó en Terrassa justo cuando los palestinos fueron expulsados de sus tierras. Por eso este año, en que la María hubiese cumplido cien, quise recordarla en Vícar durante la IX Marcha de la Desbandá. La huida de Málaga a Almería de 1937, fue una masacre perpetrada por los fascismos, nacionales e internacionales. Hoy, lo que sucede en Gaza, es un exterminio, genocidio y una afrenta a la humanidad. Debemos pararlo., y sus autores deben ser juzgados. Con ese empeño iremos a despedir a La Flotilla de la Libertad que zarpa dentro de unas horas de Barcelona. Su suerte también es la nuestra: sus fotos, sueños y olivos.


 

Para dar tú opinión tienes que estar registrado.

Comments powered by CComment