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¿Qué significa hacer buen tiempo? Así, sin pensar demasiado, no es de extrañar que la respuesta sea: calorcito, solecito, playa, piscina, cervezas fresquitas en una terraza, tomar el sol, librarse de… |
2023-05-07
¿Qué significa hacer buen tiempo? Así, sin pensar demasiado, no es de extrañar que la respuesta sea: calorcito, solecito, playa, piscina, cervezas fresquitas en una terraza, tomar el sol, librarse de la ropa de abrigo, y tantas otras situaciones similares que nos hacen viajar a los meses de verano, y a las tan deseadas vacaciones unidas a ellos. Y sí, no voy a negar que, entre marzo y septiembre, incluso octubre, si estiramos el calendario meteorológico, podamos comprar que todo lo señalado anteriormente sea buen tiempo. Sin embargo, cuando las temperaturas que propician estos comportamientos y actividades se extienden durante todo el año, no es que ya no sea correcto hablar de buen tiempo, sino que nos hallaríamos ante un tiempo pésimo.
Por poner un ejemplo, “llover a cántaros” lo entendemos como sinónimo de mal tiempo, y en absoluto lo sería si lo hace durante los meses de invierno. Es más, ahora, en plena primavera, y con la sequía que nos oprime, amenazando con convertir nuestro bonito país y gran parte de nuestro planeta en un enorme desierto, sería una noticia excelente que lloviera como si no hubiera un mañana, eso sí, sin pasar al extremo opuesto y que esas lluvias se conviertan en inundaciones que arrasen con todo lo habido y por haber. En mi opinión, y me atrevería a decir que en la de la mayoría de las personas, y dada la situación que atravesamos, un verano de lluvias sería el mejor regalo que la naturaleza nos podría hacer, a nosotros, a nuestros campos, a nuestra agricultura, a nuestra ganadería, a nuestros pantanos, a nuestra economía, y a nuestra vida en general. Porque es posible que este año tengamos unas vacaciones de verano medio normales, pero, no hay duda, si el cielo nos sigue negando la lluvia, más pronto que tarde nos vamos a encontrar con un panorama muy negro. Sin agua no somos nada ni nadie. Y no estamos como para esperar que las precipitaciones nos lleguen en diciembre. Necesitamos agua YA, y mucha, no cuatro gotas que ni siquiera mojan el suelo. Ojalá la salida en procesión de Nuestro Padre Jesús, el querido “Abuelo” de Jaén, la tarde del pasado 1 de mayo, como rogativa para recibir la tan ansiada lluvia sea escuchada.
Frío, lluvias, nieve, viento en invierno; y sol, calor y tiempo más seco en verano. Eso significa la expresión hacer buen tiempo, por mucho que nos cueste aceptarlo. Eso sí, en su justa medida, tampoco hace falta exagerar, y el tiempo, gastándonos una broma pesada, a veces es muy dado a ello. Y no estamos para bromas.
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